La Contabilidad, al registrar sistemáticamente las operaciones y transacciones que ocurren en los diferentes procesos económicos, no puede efectuar estos registros anárquicamente, sino que requiere de un conjunto de elementos que sistematicen su ejecución, siendo primordial entre esos elementos, el Nomenclador de Cuentas, conocido también como Clasificador o Catálogo de Cuentas.

En los últimos tiempos, con el desarrollo de las transacciones económicas, los países en el marco de la Contabilidad y el Control, han ido instituyendo el Nomenclador de Cuentas Nacional, al estar necesitados de un canal de información uniforme.

Este Nomenclador de Cuentas se utilizará en las todas las entidades del Sector Público, Privado y Mixto, así como en el sector cooperativo y campesino, las que deberán adecuarlos, según sus necesidades, respetando los rangos de cuentas.

En este capítulo se relacionan las cuentas autorizadas para las unidades presupuestadas a partir del Nomenclador de Cuentas Nacional al estar necesitados de un canal de información uniforme.

Este nomenclador no es aplicación para las entidades financieras bancarias y no bancarias, con excepción de las del Seguro.

Por último, se llama la atención en el sentido de que las entidades al elaborar su Nomenclador de Cuentas, no tienen necesariamente que utilizar el total de las cuentas que aparecen en el Nomenclador Nacional, ya que ello depende de la naturaleza de las operaciones económicas que realicen; pudiendo, además, adecuar sus nombres, aunque respetando el rango de códigos establecidos para cada cuenta y el contenido económico de cada una de ellas.

Las entidades que realicen operaciones en moneda libremente convertible o pesos convertibles pueden diseñar sus nomencladores de forma tal que les permita identificar estas operaciones y puedan obtener información por tipos de monedas, siempre y cuando garanticen el cumplimiento de las Normas Cubanas de Información Financiera, teniendo en cuenta que la Contabilidad de una entidad, es el registro contable y oportuno de todas las operaciones y hechos económicos que afecten su patrimonio y que cada entidad tiene una sola Contabilidad y, por consiguiente, un solo resultado, cuya representación monetaria es el Peso Cubano.